Infinitesimal

"Vamos hablando claro, que nos sepa a realidad... Ni yo estoy para quererlo, ni usted para enamorarse de mí, pero... para ser sincera... su sonrisa provoca la mía, sin intención de nada proponer, pero tampoco dejar de hacerlo, permítame ser franca y reconocer que yo a usted le besaría hasta la luz de la mirada, la pureza del ser y me apropiaría por un instante de la magia que existe en usted.

Usted llegó a mi vida tarde, yo llegué a la suya retrasada, con el alma desgastada y con los sueños malbaratados, usted llegó sin querer hacerlo, usted me mira y tiemblo, se crean universos en mi galaxia, relampaguea mi firmamento, pero por alguna extraña razón usted y yo no estamos para amarnos, es tan perfecto... de usted me enamoraría, pero no tengo las fuerzas para intentarlo.

Usted me mira diferente, con fuego del que no te provoca cualquiera, pero por más que usted quisiera, de mí no se enamoraría, no se ría si se lo digo, no soy la dulzura andando, ni la mujer idealizada, soy todo lo contrario a lo que busca, a lo que usted probablemente tiene pero para ser honesta, no me interesa serlo, no me interesa que usted se enamore de mí, usted me estimula el intelecto y es lo que me interesa de usted, me interesa erotisarle las ideas y arrancarle la sonrisa, morderle las ideas, devorar sus suspiros, no me interesa que nos queramos, me interesa que nos sintamos, sin mucha intención de llegar a ningún lado, dejaré entre mis líneas la invitación abierta a explotar las letras en la piel, que para decir cosas, cualquiera puede... pero, yo no quiero más poesías en tinta, yo quiero poemas de sus yemas al paso de los poros de mi piel, quiero versos encerrados en la luna de una habitación ajena, entre sábanas mojadas... yo quiero hacer de su cuerpo el mejor de mis textos, yo a usted lo quiero escribir a pulso fino, con nervios, con pasión y desenfreno... yo lo quiero escribir, lo quiero sentir... sin sentir con el corazón".